Mi nombre es Bernardita, tengo 55 años, estuve casada durante 28 años de mi vida y tengo 5 hijos. 

Estoy muy agradecida por la ayuda recibida de Claudia en mi terapia.  Sin duda, Dios la puso en mi camino para ayudarme a salir de este trance tan duro y doloroso de la separación, algo que jamás pensé vivir.

Llegué a ella a través de su programa en Radio María, donde al escucharla, me di cuenta de que ella era la persona que yo necesitaba para ayudarme en lo que estaba viviendo.

Cuando comenzamos, yo estaba muy confundida, no sabía qué iba a pasar, cómo manejar las emociones que quedan a flor de piel en esto de la separación. Algo tan contradictorio con lo que yo creía y había querido para mi vida, un matrimonio para siempre. 

Con su terapia he logrado ir avanzando en mi proceso de duelo, he logrado ir haciendo un camino coherente con mis principios en esta nueva forma de vivir en familia. En cada sesión fui recibiendo herramientas para poder vivir este proceso sin tanta confusión y rigidez.  Al mismo tiempo, fui recibiendo su contención en los distintos momentos que conlleva la separación, entendiendo que me tomará tiempo, que debo ser paciente y vivir sus etapas, de las que voy y vuelvo afectada por el día a día y por enfrentarme a decisiones que tengo que ir aprendiendo a tomar.

Sé que el recorrido es largo, que queda mucho por andar, pero en este primer año de mi separación, ella ha sido clave para poder asumirla, para ir teniendo la claridad que necesito para reconstruir mi vida y la de mi familia, y para poder contener y ayudar a mis hijos en este proceso.  

Recomiendo a Claudia como psicóloga en procesos de separación por su gran profesionalismo y expertis, por su capacidad para contenerme, por entregar un tiempo oportuno en cada sesión, por sus experiencias de vida, en fin, por ser una gran profesional.

Agradezco su trabajo y también a Dios el ponerla en mi camino.

Bernardita